Acabo de escribir una entrada gigantesca acerca de los líos de la Orquesta Filarmónica de Bogotá y se me borró - Blogger no se ha terminado de inventar. Voy a resumir mis puntos porque no tengo tiempo de recrear lo ya escrito...
1. Hay dos cosas en discusión en este momento que motivan la huelga de hambre...
- Según la ley, todos los empleados públicos del país deben volver a concursar por sus puestos junto con otros candidatos. Los músicos consideran que no deben volver a concursar por sus puestos porque consideran que siguen siendo trabajadores oficiales y que tienen un contrato de trabajo y una convención colectiva vigentes.
- Los músicos protestan porque ante este nuevo concurso ha salido a la luz que los extranjeros que están actualmente en la orquesta (oboe, fagot, trompeta, trombón, etc.) ni siquiera podrían presentarse a concursar porque los cargos públicos no pueden ser ocupados por extranjeros.
2. Según un fallo del Consejo de Estado del 10 de febrero de 2000, los empleados artísticos y administrativos de la Orquesta son empleados públicos (ver mayor información aquí). Ante este fallo es poco lo que una huelga de hambre, el Alcalde, el Contralor, o el mismísimo Presidente puedan hacer. Supuestamente hay un proyecto de ley tramitándose en el Congreso que solucionaría todo esto. Si como reporta la prensa el Alcalde ya ha hablado con el Presidente para empujar este proyecto, tal vez los asuntos se arreglen pronto de manera satisfactoria.
3. ¿Dónde está el piloto? ¿Dónde está Irwin Hoffman, director artístico de la orquesta? El director norteamericano no está siendo perjudicado por la ley de concursos de carrera administrativa pues él trabaja bajo un contrato de prestación de servicios. Sin embargo, parte de su papel como director de la orquesta es asumir un liderazgo en asuntos como éstos; un liderazgo que permita explicar las implicaciones, los riesgos, las realidades de volver a hacer audiciones, de no aceptar extranjeros en una orquesta, etc. En vez de tener que recurrir a huelgas de hambre de tres o cuatro músicos, éstos deberían tener el respaldo y representación de una persona que por su posición jerárquica y por la reverencia que le hace la sociedad suele ser escuchado con atención y a veces es hasta obedecido. Ojalá Hoffman asuma su rol y que no sea ésta una repetición de su lánguida actuación cuando en sus manos se deshizo la Orquesta Sinfónica de Colombia en el 2002.
Vínculos adicionales
Acerca de la huelga de hambre: El Tiempo 1, El Tiempo 2, El Tiempo 3
Acerca del liderazgo orquestal: BogoMusic - Liderazgo
Acerca de la Filarmónica: OFB - Cuatro ingredientes esenciales I, II, III, IV
Comentarios